Bible Commentaries
Deuteronomio 34

Versículo 1

Y Moisés subió de los llanos de Moab al monte de Nebo, a la cumbre del Pisga, que está enfrente de Jericó. Y el SEÑOR le mostró toda la tierra de Galaad hasta Dan,

Ver. 1. Y Moisés subió. ] Con tantas ganas de morir como siempre de cenar; porque fue pero (como dijo ese mártir) parpadeando un poco, y estaba en el cielo de inmediato.

Versículo 2

Y todo Neftalí, y la tierra de Efraín, y Manasés, y toda la tierra de Judá hasta el último mar,

Ver. 2. Hasta el último mar. ] El Mediterraneo.

Versículo 3

Y al sur, y la llanura del valle de Jericó, la ciudad de las palmeras, hasta Zoar.

Ver. 3. La ciudad de las palmeras. ] Así también lo llaman incluso los autores paganos.

Versículo 4

Y el SEÑOR le dijo: Esta es la tierra que juré a Abraham, a Isaac y a Jacob, diciendo: A tu descendencia la daré; te he hecho ver con tus ojos, pero no pasarás allá.

Ver. 4. Te he hecho verlo. ] Por un poder extraordinario, porque de una manera ordinaria Moisés nunca podría haber tomado una perspectiva tan grande a la vez. La fe pone la cabeza del hombre en el cielo y le da una visión de cosas mucho mejores; ni visión solamente, sino también fruto, que Moisés no tuvo.

Versículo 5

Y murió allí Moisés siervo del SEÑOR en la tierra de Moab, conforme a la palabra del SEÑOR.

Ver. 5. Entonces murió Moisés, el siervo del Señor. ] Ya no era más entre Dios y Moisés, sino que sube y muere; ciertamente cambió su lugar, pero no su compañía; la muerte no era para él más que el amanecer de un resplandor eterno.

Según la palabra del Señor. ] Heb .: De la boca del Señor. Por eso, Cornelius a Lapide dice que escuchó a uno predicar que Moisés murió besado por Dios. Los médicos judíos exponen este texto, como si Dios en verdad le quitara el alma con un beso (la madre amorosa que hemos visto besar al niño y luego acostarlo a dormir); y de sus 903 tipos de muerte, dicen que esta es la más fácil. a Dios le ordenó a Moisés que se acostara y durmiera, Deuteronomio 31:16 y él, en consecuencia, se acostó cuando su Padre se lo ordenó.

un Maimónido.

Versículo 6

Y lo sepultó en un valle en la tierra de Moab, enfrente de Bet-peor; mas nadie sabe de su sepulcro hasta hoy.

Ver. 6. Y lo enterró. ] O el Señor o Miguel. Jueces 1: 9 Allí yace el cuerpo de Moisés como en una cámara de descanso o en un lecho de plumas. Isa 57: 2 Su polvo mismo es precioso; porque Cristo no es perfecto sin él. Efesios 1:23

Pero nadie conoce su sepulcro. ] Aunque el diablo hizo mucho ruido al respecto, Jueces 1: 9 como deseoso de establecerse en el corazón de los vivos. Así que Crisóstomo, Teodoreto, Procopio y otros piensan: sin embargo, no encontramos en ninguna parte que los judíos fueran adictos a este tipo de idolatría, es decir, a adorar las reliquias de los santos difuntos. a Pero de la disputa de Miguel con el diablo, sobre el cuerpo de Moisés, leemos en Orígenes by otros, c que (además de lo que Judas tiene) había en los tiempos primitivos un cierto libro apócrifo, llamado Mωυσεως Aναληψις, la Asunción de Moisés , donde se registró, y por lo tanto, probablemente, Judas lo tenía.

a λειψανολατρια.

b Pερι αρχων, lib. iii. gorra. 2.

c Abath R. Nathan.

Versículo 7

Y Moisés tenía ciento veinte años cuando murió: su ojo no se oscureció, ni su fuerza natural disminuyó.

Ver. 7. ni perdió su vigor un disminuido.] Jerome lee, ni sus dientes desatado. Y el uso del maná podría ser alguna razón, siendo un tipo de alimento exquisitamente puro, de una sustancia aérea y poco corruptible.

a לחה gena, maxilar.

Versículo 8

Y los hijos de Israel lloraron por Moisés en las llanuras de Moab treinta días; así se acabaron los días de lloro y duelo por Moisés.

Ver. 8. Y los hijos de Israel lloraron. ] Y estaban dispuestos a desear, probablemente, como lo hicieron los romanos por Augusto, que o nunca hubiera nacido o que nunca hubiera muerto.

Treinta días. ] Como antes habían hecho con Aarón. Núm 20:29 Los médicos judíos nos dicen que Moisés nació el séptimo día del mes Adar (que corresponde a nuestro febrero), y que el séptimo día del mismo mes Adar fue sacado del mundo, siendo exactamente 120 años. Una tercera parte de sus días que pasó en Egipto, otro en Madián, y el último en la realización de este pueblo a la frontera de Canaán, como Josefo una observa, también. Los judíos hasta el día de hoy mantienen un ayuno solemne el día siete de Adar, en recuerdo de su muerte.

a Antiq., lib. iv. ad fin.

Versículo 9

Y Josué hijo de Nun estaba lleno del espíritu de sabiduría; porque Moisés había puesto sus manos sobre él, y los hijos de Israel le escucharon, e hicieron como el SEÑOR había mandado a Moisés.

Ver. 9. Y Josué hijo de Nun. ] Sic uno avulso, no deficitario alter Aureus. El duque de Florencia dio para su estandarte, un gran árbol, con muchas ramas extendidas, una de ellas cortada, con este lema anterior, como se rompe uno, otro se levanta en la habitación. a

un Pintus en Dan. iv.

Versículo 10

Y desde entonces no se ha levantado profeta en Israel como Moisés, a quien el SEÑOR conoció cara a cara,

Ver. 10. Y no surgió. ] Este testimonio, y de hecho todo este capítulo, se cree que fue agregado por Josué o Eleazar, siendo divinamente inspirados, para completar la historia, famosa en todo el mundo; aprobado y expuesto por todos los profetas y apóstoles santos, que de esta fuente, o más bien del océano de la divinidad, una como Teodoreto llama Moisés, han regado sus diversos jardines; sí, al presionar los deberes morales, ¿qué más hacen sino explicar el Pentateuco? ¿Qué hacen sino despliegan y extraen ese tapiz de un rico tapiz que antes estaba doblado? Seguramente el Pentateuco bien puede reclamar el título, De Originibus, por encima de todos los demás escritos.

Y de Moisés, su autor, es mucho mejor decir, que una vez del pagano Homero, que ni antes de él hubo quien pudiera imitar, ni después de él nadie que pudiera imitarlo. b Pero qué tonto notoriamente arrogante fue Henry Nicholas, el fundador de los Familists (si eso fuera cierto en él, como lo informa un escritor de buena nota) c, es decir, que se jactó entre sus seguidores en Holanda, que él mismo debería ser preferido antes que Moisés y Cristo; porque Moisés enseñó la esperanza, la fe de Cristo, pero enseñó el amor, que era la mayor de esas tres gracias.

Dijo, además, que Moisés estaba en el atrio exterior, Cristo entró en el lugar santo, pero que él mismo entró en el lugar santísimo; sí, blasfemadamente dio a conocer que participó con Dios de su deidad, y Dios con él de su humanidad.

un apelativo de Theodoretus Mosem, τον της θεολογιας ωκεανον

b Patercul.

c Ich. Laet. Compensar. Hist, Univers., Pág. 583.

Versículo 11

En todas las señales y prodigios que el SEÑOR le envió a hacer en la tierra de Egipto para el faraón, todos sus siervos y toda su tierra,

Ver. 11. En todos los signos. ] Aquí termina el Pentateuco, que comprende la historia de 2552 años y medio, desde el principio del mundo; y es todo (como sostienen algunos) lo que fue traducido por la Septuaginta. a

un Schickard.

Versículo 12

Y en toda esa mano poderosa, y en todo el gran terror que hizo Moisés ante los ojos de todo Israel.

Ver. 12. Ver Trapp en " Deu 34:11 "